El festejo de los Bucaneros de Tampa Bay, luego de vencer en el Raymond James Stadium a los Jefes de Kansas City por 9-31, lo que le otorgó al equipo dirigido por Bruce Arians el segundo Super Bowl en la historia de la franquicia, ha sido largo para los jugadores, que continúan con la celebración de la hazaña.
Pero el que se llevó los reflectores fue la estrella de Tampa Bay, Tom Brady, quien fue captado después del desfile de barcos que se organizó por el título de la NFL, aparentemente en estado inconveniente.
En primer lugar, en uno de los momentos del desfile, el quarterback de 43 años tomó el trofeo Vince Lombardi y lo arrojó a otra embarcación. Afortunadamente lo cacharon del otro lado y no hubo mayores inconvenientes.
Una vez finalizado el paseo, captaron al siete veces campeón de la NFL en aparente estado de ebriedad, y siendo escoltado por una persona, mientras todos los medios de comunicación presentes lo captaban. Brady llevaba puesta una gorra, unos lentes oscuros, y una sonrisa “de oreja a oreja”.
Minutos más tarde, el mariscal de campo respondió el video publicado por la cadena ESPN a través de Twitter: No hay nada que ver… solo un poco de Aguacate Tequila”.
Lo que también llamó la atención es que nunca se vio a los jugadores de Tampa Bay tomando precauciones por la pandemia. Ninguno de ellos portaba cubrebocas, e incluso algunos aficionados se acercaron y muchos de ellos hicieron caso omiso a las regulaciones de la sana distancia.
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