Como el ave fénix, Monterrey volvió de sus cenizas. Rayadas vino de atrás, remontó en el BBVA 2-1 y se metió a la Final de la Liga MX Femenil por global de 2-2 ante Atlas y mejor posición en la tabla. Las albiazules mostraron dos caras en el partido, un primer tiempo sin idea y un segundo lapso en el que les salió todo. Nuevo León vivirá su quinta Final Nacional Femenil y chocarán los dos clubes que mejores resultados tuvieron en el torneo.
Rayadas salió al partido sin contagiarse del ambiente que había en el inmueble. Al equipo de Eva Espejo le costó mucho ir al frente, tuvo destellos, pero fue muy predecible y la creatividad no se presentaba para las regias. Atlas se mantuvo paciente y al asecho, con pocas chances, pero más peligrosas.
Aunque casi no apareció en el primer tiempo, Alison González adelantó a las Rojinegras en el marcador después de una mala salida de la defensa de Rayadas, pues la delantera tapatía le ganó la espalda a Cadena y Bernal, se fue sola ante Alejandría Godínez y con una definición fría, le complicó las cosas al local. Todo cambió justo al final del primer lapso, pues en una jugada similar, González chocó con Godínez y ya no volvió para el segundo tiempo.
En el vestidor de Rayadas algo pasó, pues las futbolistas albiazules salieron totalmente cambiadas para el complemento. Rayadas ganó la media cancha y de los pelotazos que mandaba desde defensa en el primer tiempo, pasó a los pases cortos, transiciones rápidas y se desplegó muy bien por las bandas. Aylin, quien fue la más insistente y creativa, aprovechó por la izquierda, se mandó un jugadón con túnel incluido, se quitó a dos y le puso medio gol a Christina Burkenroad.
Con el resurgir de Rayadas, el equipo de Espejo se animó, Atlas, sin Alison en la cancha, perdió referencia de ataque y desapareció a la ofensiva. El orden que había tenido en toda la serie se fue y la defensa tapatía titubeó mucho. Diana Evangelista le dio el pase a Rayadas con un golazo de fuera del área, disparo por el sector derecho que se metió al ángulo izquierdo de la arquera Ana Gaby Paz. De manera increíble, en minutos, Rayadas volvió.
De ahí en adelante, lo de Atlas fue más amor propio que buen futbol. El equipo de Fernando Samayoa lo intentó, fue para adelante, pero ahora sí la defensa regia estuvo impasable, Rebeca Bernal comandó desde la parte baja y el local controló el tiempo, ritmo y al final, también el partido.
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