La Fórmula 1 no suspenderá una carrera si se presenta un caso positivo de coronavirus en el paddock, dijo el jefe de la Comisión Médica de la FIA.
La Fórmula 1 intentó iniciar su temporada 2020 en marzo pasado en Australia solo para verse forzada a cancelar la cita, una vez que todo el paddock de la categoría se encontraba en Melbourne, después de que un miembro del equipo McLaren diera positivo por COVID-19.
Desde entonces la F1 ha cancelado las siguientes nueve pruebas del calendario y ahora trabaja firme en iniciar su campeonato el 5 de julio próximo en Austria con estrictas medidas para evitar complicaciones por el coronavirus.
Sin embargo, en caso de encontrarse un caso positivo, no sucederá como en Australia y el plan es seguir adelante con el gran premio.
"Si hay un nuevo contagio, el mundo no tendrá que detenerse, sería como decir que cerramos el metro porque se ha encontrado un pasajero positivo", dijo Gerard Saillant, jefe de la Comisión Médica de la FIA, al diario deportivo francés L'Équipe.
"La situación ha cambiado desde marzo en Australia, ahora tenemos una prueba de diagnóstico rápido y podemos aislar a las personas que han estado en contacto con un caso infectado", agregó.
Parte del plan de la FIA es que transformar el paddock en un entorno aislado del resto del mundo desde el punto de vista sanitario, realizando pruebas rápidas para detectar casos positivos, contando con médicos anti-coronavirus capaces de intervenir a tiempo. Habrá también una aplicación disponible para rastrear los contactos entre las personas de la F1, ya que el paddock tendrá un acceso limitado.
"Obviamente se respetarán todos los reglamentos sanitarios de cada país. Porque está claro que es diferente correr en un circuito urbano como en Vietnam o Singapur, comparado con una pista permanente fuera de la ciudad. Ya hoy el gobierno de Singapur podría obligar a todo el paddock a una cuarentena de dos semanas antes de entrar en la pista".
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