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Foto del escritorFernando Sánchez

EL GIGANTE DE CONCACAF


México sufrió mucho, sigue sin encontrar regularidad, no pudo defender ninguna jugada a balón parado y terminó perdiendo 3-2 ante Estados Unidos, que se quedó con el título de la Liga de Naciones de la Concacaf. En tiempo extra, los penales marcaron el rumbo: los gringos aprovecharon el suyo y, para variar, el Tri falló el que tuvo


Un partido para nada sencillo y en el que el cuadro azteca dejó muchas dudas. Empezó ganando temprano gracias a un gol de Jesús Manuel Corona producto del error de McKenzie, pero aún así, no supo manejar el partido y sigue sin mostrar un estilo de juego definido.


Giovanni Reyna empató el marcador bajo la tónica que la selección norteamericana utilizó para hacer daño durante todo el partido: el remate tras tiro de esquina. México nunca se acomodó bien atrás, le ganaron por aire y el futbolista del Dortmund se encontró el balón pleno para emparejar el marcador.


De ahí en más, un duelo a ida y vuelta en el que no hubo un mandón, Estados Unidos fue bien a contragolpe, pero falló en la última zona y México buscaba por las bandas, paseaba el balón, pero jamás hizo daño verdadero. Fue hasta que entró Diego Lainez que con una gran jugada individual disparó en linderos del área y adelantó al conjunto del Tata.


Cuando parecía que los norteamericanos estaban en la lona, otra vez la pelota parada le hizo daño al cuadro mexicano al que le repitieron la dosis del primer gol: tiro de esquina, se desordenó la defensa y Weston McKennie llegó a rematar para vencer a Guillermo Ochoa. No aprendió ni el Tata, ni sus jugadores.


Ya en el segundo tiempo extra, Carlos Salcedo metió fuerte la pierna dentro del área, impidió el paso de Pulisic y tras revisar el VAR y en medio de la polémica, con expulsión de Martino incluida, el árbitro panameño John Pitti decidió sancionar la pena máxima, misma que el 10 del Chelsea aprovechó y mandó el balón a guardar.


Y pensábamos que todo terminaba ahí, pero no fue así. En tiro de esquina, otra vez McKenzie se equivocó, metió la mano tras un remate mexicano y el central marcó penal. Ethan Hovarth, que entró al partido luego de la lesión de Steffen, se vistió de héroe y le detuvo el tiro de castigo a Andrés Guardado, para que su equipo se coronara.


Lo que sigue: México enfrenta a Honduras el 11 de junio en Atlanta y el 30 jugará contra Panamá en Nashville, ambos duelos amistosos con miras a su participación en la Copa Oro que arrancará el 10 de julio con rival aún por definir. Por su parte, Estados Unidos tendrá amistoso contra Costa Rica el 9 de junio y debuta el 11 de julio en la Copa Oro y sigue en espera de conocer a su contrincante.

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