Sergio Pérez finalizó sexto en el primer entrenamiento libre de la jornada en el circuito de Paul Ricard, terminando a más de un segundo del más veloz, Charles Leclerc, tras haber protagonizado un fuerte trompo durante el desarrollo de la práctica.
Más tarde, en el segundo ensayo, el piloto mexicano pasó unos 20 minutos en el garaje mientras el equipo trabajaba en su coche y solo pudo completar un simulacro de clasificación con neumáticos blandos, lo cual lo dejó décimo en los tiempos, a un segundo y medio de Carlos Sainz, el autor de la mejor vuelta del día.
Preguntado por el largo período que pasó en los pits sin salir a pista, Pérez explicó: "Básicamente estuvimos teniendo algunos retrasos. Nada en realidad, un pequeño problema con una de las barras estabilizadoras, pero nada importante".
Ampliando sobre sus sensaciones con el monoplaza RB18 este viernes en Francia, el piloto de Guadalajara fue claro al indicar que no está en un buen sitio y espera encontrar respuestas pronto. "Obviamente no estoy muy cómodo en este momento con el coche ni a una vuelta ni en ritmo de carrera", declaró el mexicano.
"Creo que hay un buen trabajo y entendimiento que hacer esta noche. Tratar de recoger las mejores piezas para la clasificación y la carrera".
Sobre la dificultad que puede implicar el sábado el hecho de haber podido realizar un único simulacro de clasificación el viernes con el neumático blando, Pérez comentó: "Sí, ha sido un stint muy corto con el neumático blando, pero es lo que hay y espero que mañana seamos capaces de juntar todo y estar en la lucha".
Pérez llegó al Gran Premio de Francia de este fin de semana con la necesidad de conseguir un buen resultado tras verse forzado a retirarse hace dos semanas en Austria por un contacto con George Russell, lo cual marcó su segundo retiro en las últimas tres carreras.
El piloto de Red Bull se encuentra tercero en el campeonato con 151 puntos, 19 unidades atrás del segundo, Leclerc, y 18 puntos por delante del cuarto, Sainz.
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